jueves, 7 de octubre de 2010

Un poquito de vergüenza, por favor.






Leemos a Fernando Domecq, propietario de Zalduendo, en Sevilla Taurina, tras la canallada zalduendista, echar mano a la diarrea para justificarse:  


"en la semana previa a la corrida de Sevilla sufrimos en la ganadería una infección digestiva e intestinal, y los toros para Sevilla perdieron más de 20 kilos, lo que lógicamente afectó a su fortaleza, mostrándose débiles en el ruedo. Se podía ver perfectamente en la plaza que estaban escurridos de atrás. Estamos investigando qué ha producido la infección, pero esa es la realidad. Y cuando las cosas salen mal, salen mal. No hay otras justificaciones y sólo queda pedir perdón a Sevilla por lo sucedido"



Luego, pasó lo que pasó: los bailes de corrales, los sobreros del Puerto de Santa María para Sevilla, los titulares derrumbarse y la Fiesta, por los suelos.








Lorenzo Fraile, ganadero del Puerto de San Lorenzo, declara en Burladero, tras el fraude al que sometió a casi veintemil almas en la primera plaza del mundo, lo siguiente:


...a estas alturas de temporada, mandan las circunstancias más que el propio ganadero.  Varios toros de los que tenían que haber ido a Madrid ayer, no fueron finalmente. Ha habido tres o cuatro bajas, uno cojeaba, otro tenia una falla en un pitón...



Total, que termina mandando lo que todos vimos salir por chiqueros, ratitas indecentes, que casi convierten al aficionado venteño en una especie de pederasta taurino: pagando por ver toros con el guarismo 7 pasearse por el ruedo.


¿No hay una pizca de vergüenza? ¿Se duerme bien con la conciencia echa orines? ¿Qué interesa? ¿El toro, el dinero o el aficionado?

No creo que les fuera tan difícil, a los señores Fraile y Domecq, descolgar el teléfono, piticlinear a la empresa y decir: sintiéndolo mucho no tengo toros para su plaza, se me han estropeado los que había reseñados y no es cabal engañar al aficionado y poner en entredicho el nombre de mi linaje ganadero por cuatro perras. Vayánse ustedes al campo a la ganadería de algún compañero y elijan el ganado que deje a todos tan contentos y no ponga a esta Fiesta que tanto amamos en el candelero de la vergüenza.


Pues no. Para Sevilla, diarrea. Para Madrid, jovencitos. Para los ganaderos, billetes calentitos.









Tema aparte, son las declaraciones de Justo Hernández, representante de Garcigrande, llamando tonto del pueblo al presidente de Úbeda, por no indultar un torete de su ganadería. No contento con eso, se permite el lujo de aconsejar en Mundotoro, lo que hay que hacer con presidentes así: eliminarlos...


Pasan dos días, los medios claman justicia por la hecatombe que se ha formado por la muerte de un toro que se ganó la vida en la plaza, por la falta de sensibilidad y chulería de un presidente con afán de protagonismo y blá, blá, blá...  ¿Adivinan de que ganadería era el novillo que indultó Talavante de manera antirreglamentaria en el Festival de Alquerias del Niño Perdido?..


Tachaaaaaaán.! Correcto.  De Garcigrande... Sobran las palabras.








6 comentarios:

Enrique Martín dijo...

Antonio:
Podemos dar las vueltas que queramos en cuanto a los toros que no son los que estaban preparados o que estaban en malas condiciones, los toreros que apuran hasta el final para decir que no pueden torear, para ver si cuela en el último momento, que no se dice que fulanito no va hasta el momento críticop para que no devuelva el público las entradas y al final ¿quién es el que paga y sufre todo esto? pues el aficionado, y luego nos tildan de amrgaos porque ya vamos a la plaza más mosqueados que una mona. Y ¿cuál es problema más importante que tene ahora la fiesta? Que los pasen a cultura. Que descaro más grande.
Un saludo

fabad dijo...

¿Esperas verguenza?

kaparra dijo...

Ganaduros,los 3 ademas,no tienen otro nonbre,ademas creo que los 3 por temporada suelen tener la tira de "burras" para vender,asi que.....si esto fuera normal,el prosimo año tedrian que comerse un monton de "burras" con patatas,pero no. No deberia ir la gente a la plaza cuando anuncian "burras", y la gente va.
Un saludo.

MARIN dijo...

Bueno Antonio, te iba a escribir un comentario, pero por no extenderme mucho y decir lo mismo, te dejo el enlace y ya no aburro a nadie.
http://marin-lastmohican.blogspot.com/2010/10/entre-todos-lo-mataron-y-el-solo-se.html

Un saludo.

Anónimo dijo...

Antonio no hay que darle más vueltas a esto de las que merece. La empresa va a su interés (ganar dinero), para ello intentará contratar el ganado al precio más bajo posible, exceptuando contadísimas excepciones. Los ganaderos, excepto unos pocos “románticos”, van a lo suyo (ganar dinero) y para ello no sienten pudor en descastar la ganadería brava y ponerla al servicio de las exigencias de los matadores. Las figuras van a lo suyo (ganar dinero y, de paso, fama). En estos casos impera la ley del máximo rendimiento con el mínimo esfuerzo.

De otro lado estamos los sufridores, aquí impera la ley del máximo esfuerzo (cada vez pagamos entradas más caras) con el mínimo rendimiento (cada vez vemos peor ganado y, como consecuencia, peor toreo).

Después se extraña el taurineo de que prohiban la Fiesta en Cataluña. Cataluña ha sido el primer paso pero los antitaurinos, ante una Fiesta cada vez más débil, van a seguir atacando los frágiles cimientos de la Fiesta. Este año muchos ayuntamientos han suprimido festejos, algo que no creo vaya a cambiar en años venideros. Plazas que antes estaban casi llenas ahora registran medias entradas. Ahora que reflexionen los taurinos sobre el por qué de todo esto.

Saludos, J.Carlos.

Antonio Díaz dijo...

A todos, que voy con prisa -lo siento-, no espero vergüenza, pero lo de mandar toros con diarrea a la Maestranza no tiene nombre... o sí. Ese señor es un ladrón. Sin paliativos.


Saludos