lunes, 28 de febrero de 2011

Obra maestra sin toro

El "toro" del triunfo. Foto: Julián López





Escribe Carlos Ilián en Marca:


...Ya era difícil superar aquella obra de arte porque el de la Puebla lo bordó en derechazos bellísimos y naturales que resultaron un monu ejemplarmento a esa suerte tan fundamental. Qué hondura, qué armonia, qué manera de ligar, dejando la muleta adelantada para que el conjunto de tanta belleza y tanta torería reuniera, además, la importancia de la obra bien rematada. Todo lo anterior en loa de un torero cumbre que rindió homenaje con esa faena a la memoria de Pepín Martín Vázquez, el gran artista sevillano fallecido ayer a los 83 años. Hasta aquí la parte que me cabe elogiar de Morante. Pero no se puede aceptar que enfrente tuvo un perro con dos pitoncitos, un animalito que no se lidia ni en la más pobre plaza de pueblo. Tanta belleza en el toreo de Morante queda devaluada por aquel impresentable ejemplar de Cuvillo...


Escribe José Ramón Márquez en Salmonetes:


En su segundo, nada y nada, algunas dudas y bastante envaramiento hasta que brilla de pronto un enorme redondo en medio de una tanda que iba planteada con poquísimo mando y después, de sopetón, cuatro soberbios naturales lentísimos y uno de pecho, extraordinarios. Toreo bonito en su más purísima expresión, composición plástica al servicio de nada, magnífica estética por la estética, plasticidad que, por desdicha, ni tiene finalidad ni objeto.


 Escribe Antonio Lorca, en el País:


No se puede presumir de figura y enfrentarse a seis gatitos en pleno Madrid sin que a uno se le caiga la cara de desvergüenza taurina."
 
Lo de las seis figuritas que han pasado por Vistalegre este fín de semana ha sido una puñalada trapera a la fiesta de los toros. 


¿Ésa es la fiesta que consideran Bien de Interés Cultural?...Eso es una farsa, la fiesta de los toros sin toros.

domingo, 27 de febrero de 2011

Morante en Vistalegre






MUNDOTOROTV



Video de Mundotoro.com.

Triunfalismo desatado

Julián López

 

 

Carlos Ilián

Marca

 

 

Impresentable corrida de Garcigrande



Esta feria de Invierno es un buen aperitivo para la temporada en Madrid, aunque muy poco tiene que ver con lo que de verdad representa el toreo en la capital. Vistalegre está situada en Carabanchel y sigue teniendo el mismo marchamo de plaza de barriada aunque el soberbio edificio multiusos que sustituyó a la vieja Chata nos ofrezca un aspecto imponente. Por desgracia el espectáculo que se ofrece tiene mucho más de provinciano que de madrileño. Para muestra la indecorosa corridita de Garcigrande que este sábado mataron tres figuras. Y lo peor: sustituía a otra rechazada por falta de trapío. Como sería entonces la que se trajeron de entrada para los tres figurones.

Por supuesto que El Juli, sobrado de sitio y con ganas de comerse con patatas aquel menú, anduvo a gorrazos con sus dos animalitos. Con facilidad y sin pasar de buen profesional pero sin el más mínimo sentimiento. Hizo el toreo industrial de esta época, esforzándose, eso sí, en el cuarto, ante el cual brujuleó para meterlo en la muleta ya que el perruno ejemplar no podía con el rabo. Enmedio del triunalismo de la tarde le obsequiaron por una orejita en cada toro.

El triunfalismo continuó con Manzanares, un torero mimado por la gente biutiful. Con el becerrote que salió en segundo lugar hizo un toreo de línea recta, sin cruzarse y como el animalito tenía cierto genio llegó a pasar algún momento incómodo. En el quinto abusó del unipase y tan sólo en una serie con la derecha ligó una tanda de buen corte. Por supuesto que también hubo orejita en cada toro. No faltaría más en una tarde tan amable y bonachona.

Pero el triunfalismo carabanchelero tuvo su momento álgido en la primera faena de Talavante ante otro perruno ejemplar. Por supuesto que el torero extremeño se esmeró en unos derechazos largos y muy cuajados, aunque forzando la figura y dejando el brazo izquierdo como si estuviera escayolado. Hombre, Talavante, ya sabe usted que ese brazo debe estar a su caida, de forma natural y nuca tan por las nubes. Claro que a la gente aquel toreo le pareció la gran maravilla y después de una eficaz estocada le dieron nada menosa que las dos orejas. En el sexto Talavante hizo un toreo de paupérrima entidad, un trámite vulgarote y pueblerino. No importa, ya tenía la puerta grande asegurada. Y todos tan contentos.

sábado, 26 de febrero de 2011

Uno de los nuestros XV: Fuente Ymbro

Tramposo. Trofeo Carriquiri al toro más bravo Feria del Toro 2010. Maurice Berho










Nota: A pesar de haberle visto muy buenos toros a Ricardo Gallardo, sigue sin ser ganadería de mi gusto. El mero hecho de convertirse -y presumir- en pioneros en manipulación y enfudado de los toros sumado a la vergüenza del tentadero con Padilla y el hijo de Adolfo Suárez hace que no me termine de llenar el ojo. Aún así, entiendo que sea del agrado de muchos. Posiblemente sea la ganadería encaste Domecq con más interés para el aficionado.

jueves, 24 de febrero de 2011

La primera, en la frente

Último Corpus granadino. Ponce con uno de Garcigrande. Ideal.es





Según Burladero, varios toros -es un decir- de Garcigrande no han sido aprobados por las autoridades veterinarias para lidiarse este sábado en Vistalegre. Otro camión, con lo caro que está el gasoil, cargado de gatitos nobles y mohínos viaja en estos instantes rumbo a Madrid. 

Los anunciados para despenar la media docena de borregas de Justo Hernández son Juli, Talavante y José Mari Manzanares, insignes miembros del gé 10.

Por cierto, en Garcigrande enfundan a los toros, con lo cual, al ser devuelta la corrida titular, deberán de ir al campo para mandar los sustitutos. Se da la circunstancia de que estos toros, que llevarán meses o incluso el año, con sus defensas escayoladas, tendrán que defender y pelear su vida dentro de 48 horas, con lo cual, el cuento de la "readaptación o reprogramación" del toro a las distancias queda desnudado. Se lidiarán bichejos que no saben para que tienen los pitones. ¡Toma emoción al canto!

¿Qué valor puede tener el triunfo, que doy por hecho, de estos tres figurones del destoreo, ante semejantes animales? El único triunfo que está asegurado es el del cachondeo de unos pocos frente a la ética de un arte con siglos de historia.


Que lo prohiban, pero ya.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Sobre el Peñarato


Escribe Paz Domingo:


Como ven ustedes, la trama se inflamó con rapidez, pero se ha desgastado en cuestión de segundos. ¿Esto de qué va? “Tú eres malo”. Tú más. Todos relajados. Oiga, ¿y el fechoría? Aquí no ha pasado nada. Pelillos a la mar. Una servidora tampoco es una jurista, pero tengo una corazonada. A mí, todo esto bien me parece algo muy raro, pero incluso al más incauto no se le escaparía que hay un cierto tufillo.

Mientras nos ahogamos, nos preguntamos. Primero. Fue bastante impúdico que el señor Martín-Peñato ostentara las presidencias de organizaciones taurinas como la Asociación de Ganaderos y la reciente Mesa del Toro, que aunque no son incompatibles por su intencionalidad taurina, si puede haber conflicto de intereses, incluso que los miembros de ambas se sientas perjudicados, o beneficiados, o utilizados, o representados por un presidente con potestad directiva en una institución y no en la otra. Segundo. ¿Por qué no denuncia el señor Peñato este “delito” (él ya se asegura de tipificarlo así) en el juzgado de guardia más cercano, olvidándose de escenografías en ruedas de prensa? Tercero. ¿Por qué no responde la Asociación de Ganaderos a las graves acusaciones?, pues se ha limitado a decir que denunciará la sustracción de documentos de la institución, pero guarda silencio, incluso en su página web donde parece que nada ha pasado manteniendo el organigrama de la anterior directiva con Martín-Peñato al frente (http://asociacionlidia.com/). Cuarto. ¿Dónde está la decencia torera en la cual uno asume las responsabilidades que le competen por cargo y moral?. Quinto. ¿Dónde esta la crisis que se lleve por delante como fuego purificador estos desmanes que terminarán con nuestra paciencia, ingenuidad y afición? 


Click aquí para leer el artículo completo.

martes, 22 de febrero de 2011

Orígenes de la Tauromaquia

Como Ángel Nieto con la Derby




Tirabuzón



O te quitas tú, o te quita el toro, que los tiene más gordos que tú.



Corridas de caballos. Los jacos, eje de la Fiesta. Guapos y engalanados. El toro vejado, sangrando por las puntas.





Así se llama el Certamen de Atarfe, una botellona de botarates saltando al ruedo como Pedro por su casa, con toros diezmados en sus defensas y toreros retirados -subvencionados por todos los andaluces- como Ruiz Miguel, bailando y haciendose fotos en el callejón. 


Es un éxito de audiencia, taquilla y público. Ahora bien, ¿qué tipo de futuro le espera a la Fiesta con semejantes atentados divulgativos? 



¿No se convertirán estos "Orígenes de la Tauromaquia" en "Defunciones de la Tauromaquia"?

 

domingo, 20 de febrero de 2011

Uno de los nuestros XIV: Doña Dolores Aguirre


Laurent Larroque.


Su divisa es amarilla y azul y luce como señal una despuntada en ambas orejas. Cobró antigüedad el 20 de mayo de 1974 y en la actualidad pasta en la Dehesa de Frías, en la localidad sevillana de Constantina.

En 1946 adquirió esta ganadería José Castellano Duque de Eustaquio Parrilla. En 1949 se dividió la ganadería en dos lotes para sus hijos don Julián y don Antonio, siendo el lote de Antonio vendido a Pablo de la Serna Gil, con el hierro y divisas primitivos.


En el año 1963 fue adquirida por Pilar Fernández Cobaleda, -a nombre de la ganadería de Campocerrado-, variando el hierro. Eliminó lo anterior y la formó con reses de Atanasio Fernández y en 1971 fue adquirida por la condesa de Donadío, que varió el hierro.


En 1971 adquirió un lote de hembras de Atanasio Fernández, y en 1977 fue vendida a Dolores Aguirre Ybarra, la ganadera vasca actual propietaria de la ganadería. En 1979 adquirió al Conde de la Corte un semental de nombre Alí, y otro llamado Tamaris.






viernes, 18 de febrero de 2011

Manso

Pérez Alarcón



 Goyesca del 2 de Mayo. Año 96. Seis para Joselito. Quinto bis, de Cortijoliva. Manso de Cossío. Condenado a banderillas negras. Así lo contó Joaquín Vidal en su crítica del País:



... La racha triunfal se cortó en el quinto toro, de El Torreón -nuevo inválido-, que derrotó fuerte en los muletazos inciales. Joselito optó por no buscarse complicaciones y aliñó. Igualmente inválido el sexto, de Ordóñez, se devolvió al corral y salió un morucho Cortijoliva que ni por todos los piensos y todas las habas del mundo quiso tomar los capotes.

Lidiado sin concierto ni recursos, tampoco quiso tomar las varas -ni una- y se le condenó a banderillas negras. Y allí fue ella pues, al sentir el arpón, se puso a pegar brincos, a correr enloquecido topando cuanto se encontrara a su paso, a desconcertar a las cuadrillas y hasta al propio Joselito cuando entraba a la brega. No desconcertó, en cambio, a José Antonio Carretero, que sacó coraje, hizo así, y le clavó en lo alto el par de banderillas.

Joselito se dobló muy toreramente con el morucho y debió confiar en que rompería a bueno, pues humillaba, pero al dar un pase de tirón el toro le desbordó enfurecido. Macheteó entonces Joselito y se quitó al pregonao de encima de un espadazo...





jueves, 17 de febrero de 2011

De locos

                                                                                                                         El Mundo.es



Copio y pego un artículo escrito por Francisco Argüello, en el Mundo.es. Recomiendo la lectura para que el aficionado siga tomando nota del punto al que estamos llegando con la nueva era de la Torerimaquia. César Rincón, en labores de comentarista, fué crítico con la labor de los toreros. El resultado: el público no lo toleró, tuvieron que sacarlo escondido y escoltado en un vehículo del interior de la plaza, mientras fuera decenas de personas lo esperaban, hasta con pancartas, para "aclararle" las ideas. Es vergonzoso. Antes cuando la corrida había sido un petardo la bronca y las almohadillas eran para los toreros, o los pitos para el mayoral. Ahora, para el inconsciente al que se le ocurre criticar a los toreros, esos intocables. Lean, lean:



César Rincon, el famoso torero colombiano, hoy alejado de los ruedos, pero dedicado a la ganadería, ha pasado tragos amargos en una corrida de toros el sábado pasado en Medellín, Antioquia, norte de este país.

El 'Torero de Madrid', como lo llamaron en su momento y quien debuta en una estación radial colombiana como comentarista de tauromaquia, asistió a una corrida y en medio del furor se despachó en la radio en contra de los toreros que protagonizaban el espectáculo, según cuentan testigos de lo ocurrido.

Sin embargo, lo que no había contado Rincón era que los toros eran de su propiedad y según Santiago Tobón, director Ejecutivo de la plaza de toros La Macarena, eran los malos del paseo y no los toreros, como se dijo en la transmisión.

Las palabras de César Rincón  han causado revuelo. El público asistente rechifló sus comentarios radiales y el matador tuvo que ser evacuado de la plaza a escondidas, en carros distintos del suyo para pasar desapercibido y con seguridad para evitar que fuera atacado por los asistentes a la corrida que, aunque lo admiran, no aceptaron sus palabras.

Santiago Tobón, ha dicho en la emisora La W, "que César Rincón y sus colegas de la emisora defendieron la corrida más de lo que la debieron haber defendido y entraron en una discusión con los aficionados que iba pasando a mayores".

Críticas

El empresario de la tauromaquia paisa, comenta que al torero colombiano lo esperaban en la calle "como decimos nosotros, con las uñas afuera porque a la plaza llegaron algunos aficionados con pancartas, criticando lo sucedido y se iba armando una pelotera que no pasó a mayores".

Rincón fue evacuado en un carro de pertenencia de Tobón para distraer a la afición "porque buscábamos que no hubiese un altercado o problema en la parte exterior. Fueron más los gritos que se registraron (...)", insiste el empresario.

Lo que ha quedado en la opinión pública de este país es que Rincón, uno de los mejores toreros que ha parido Colombia, debió declararse impedido de opinar en una corrida donde los toros le pertenecían.

Al menos, Santiago Tobón asegura que no debió comentar el espectáculo ya que no puede ser juez y parte. "Le he dicho, como gran amigo, que en las corridas de sus toros debiera hacerse a un lado y dejar que otros las comenten. Él tiene sus argumentos. Creo que hubo demasiado compañerismo de sus compañeros de la radio y el público no lo vio bien", precisa el empresario a La W, al asegurar que la culpa no es de los toros, "sino de seres humanos que se sintieron muy amigos y defendieron lo indefendible".

El tema se puso tan candente que el cronista Víctor Duisabá Rojas, en su columna del periódico El Colombiano de Medellín y titulada 'Sin Toros y al Borde de un botín', describe en su primer párrafo que "poco a poco, toro a toro, las cañas se fueron haciendo lanzas y lo que era una tarde de fiesta terminó convertida en esto que causa pena: un motín. Porque, señores, mucho, muchísimo, va de dar una bronca, de esas en las que los aficionados expresan su descontento... A pasar de la raya y lindar con la agresión personal a Rincón".

Cesar Rincón, ha respondido a la prensa y ha dicho que el toreo es de pasiones y la ética es la que tiene que salir por encima de cualquier cosa. "He sido más objetivo echándome agua sucia para que mis otros colegas ganaderos no digan que lo que hago es defender. Yo creo que he sido muy objetivo, no es la primera corrida de toros donde yo hago los comentarios de mis toros y de otros ganaderos".

Y agrega: "Hay toros malos, buenos o puede salir un petardo de corrida de toros. Estamos en una libertad de expresión y se pueden decir las cosas. Ahí es cuando yo digo que no estoy de acuerdo con los aficionados que de una u otra forma hablaron y dijeron cosas feas de mí. Hay está la polémica". César Rincón seguirá comentando por ahora las corridas de toros en Colombia. Los aficionados deberán seguir escuchando sus palabras gústeles o no.


Nota: Parece ser que circulan dos versiones contradictorias. Hace un par de días en el blog amigo de Toro, Torero y Afición,  Andrea López, que estaba en la plaza de Medellín ese día, contó su versión de los hechos.

martes, 15 de febrero de 2011

Vamos a contar mentiras, tralará...

Luis Miguel Parrado. Los Caminos del Toro.




Vamos, por un momento, a cerrar los ojos, dejar la mente en blanco y pensar como un taurino más de esos que con su palabreo emperejilado y sus buenas maneras tienen la Tauromaquia como un solar. Vamos a obviar lo evidente, a simular que esto de los toros, con sus cientos de años de Historia, lo podemos cambiar de un rato para otro, según nos salga de los colindrones. ¿Que tenemos que bajar al bar sin tema de conversación para los amiguetes? Pues nos inventamos qué se yo, que los Victorinos son grises y tobilleros porque vienen del rinoceronte africano, y no del toro, o que los Miuras tienen esa variedad de pelo porque Eduardo y Antonio, mueco mediante, les hacen la permanente.  Si la historia hay que cambiarla, se cambia, y punto. Todo sea por taurinear.

Por seguirles el rollo a esta gente vamos a dejar a un lado que Juan Pedro Domecq y Díez, fue  dueño del encaste, de ahí que Juan Pedro Domecq Solís tenga secuestrado el hierro del Duque de Veragua, que en principio se creó para bautizar toros y que ahora se utiliza para tatuar borregos. El progenitor de la estirpe bodeguera vendió a Don José Enrique Calderón lotes puros de Veragua, amén de otros conformados con sangre 75% Veragua, 25%  Tamarón. Don Tomás Prieto de la Cal -padre, se entiende- compra para formar su ganadería reses de la esposa de Marcial Lalanda, Doña Emilia Mejía, con sangre de Miura y Parladé y sementales de Tamarón. Todo esto es eliminado para comprar lo puro de Don José Enrique Calderón, que recordamos, antes se lo compró a Don Juan Pedro Domecq y Díez. Más tarde llegaría Tomás Prieto de la Cal hijo, y hasta hoy... Y que dure...  

Ha habido momentos en la ganadería veragüeña en que se han hecho experimentos, y nunca se ha negado. Sementales de Torrestrella y de la rama Domecq han padreado alguna vez, sin llegar a ligar nunca. Así, toda la descendencia fue sacrificada, sin llegar a saltar ningún producto de estos cruces nunca a ninguna plaza. Repito, desde la Ruiza nunca se han negado estos cruces de laboratorio, buscando renovar la sangre, nunca sacrificar la particularidad del encaste en pos de agradar a las figuras.

Siguiendo la tónica del post, en la que se persigue seguirles la corriente a ver dónde nos llevan, vamos a darle cancha a un cartelito de mano de hace 22 años, de la feria de Jaén, que curiosamente, no coincide con la cartelería pegada en los muros, que anuncia lo de Prieto de la Cal como de origen Torrestrella, no Juan Pedro. O sea, que hasta el que hizo los carteles no tenía claro lo que había que poner. Creo que ha quedado bastante claro por lo leído por ahí que mientras haya cartelito mojonero las pruebas y análisis del ácido desoxirribunocleico -ADN-, que como todo el mundo sabe es un estudio confuso, cosa de brujas y alquimistas, quedan en suspenso. De nada vale que en uno de los cajones de la Unión de Criadores de Toros de Lidia haya un estudio genético, firmado por Doctores en Biología, que demuestra que lo de Tomás Prieto de la Cal es Veragua puro. 

Luego que vengan a llorar con que hay que renovar el sarao, abrirse a las nuevas tecnologías y acoplarse al nuevo siglo mientras para defender el núcleo de una tauromaquia emputecida, como es lo Domecq, no dudan en poner en entredicho a toda la Ingeniería Genética con un dudoso cartel del año de la Tana.


Me hace gracia comprobar también, como para ser una novillada origen Juan Pedro Domecq, las figuras de la novillería de entonces, como eran Jesulín de Ubrique, Finito de Córdoba y Enrique Ponce se pasan a la de Peralta, mientras el festejo de la discordia se queda en manos del Nete, Juan Carlos García y el Andujano. Esa historia ya me la sé porque la he visto muchas veces. 


El caso es que vamos a olvidar todo esto y se les dá la razón: la ganadería de Prieto de la Cal contiene sangre de Domecq, vía Algarra, Torrestrella y no se cuántas cosas más. De acuerdo, para ustedes la perra gorda.


Ahora, conociendo ya lo que es esta ganadería onubense, que por lo que se ve nos ha estado tomando el pelo a todos, me gustaría lanzar el guante al ciprés pétreo de Galapagar, que anda mirando y remirando cuvillos para el día que vuelva, si es que vuelve. Al Juli, Morante y Manzanares, que hicieron el ridículo anunciándose con una birria de Zalduendo por San Miguel y que han hecho la gesta de anunciarse otra vez por Resurrección, en lo que se podría catalogar como corrida del Domingo del Perdón, con toretes de Daniel Ruíz. A todos ellos, y a algunos más, decirles que ahí tenéis otra ganadería de Domecq más, de las que tanto os gustan, para hacer el arte, sentirse torero y cortar orejas a diestro y siniestro. Venga, valientes. Que también estos vienen de lo Domecq...



Cuvillo. Picotazo. José Tomás. Granada. Foto: Ideal.es


Prieto de la Cal. Seis Puyazos. Serafín Marín. Zaragoza. Foto: Sánchez Mejías.



domingo, 13 de febrero de 2011

Uno de los nuestros XIII: Guardiola

Foto: Patricia Rodríguez




Nota 1: De nota el tentadero con José Luis Moreno.
Nota 2: Si no me equivoco y nadie me contradice, esta ganadería señera también se ha apuntado a la moda de las fundas. 







sábado, 12 de febrero de 2011

De tal palo tal astilla













El Juli, Maestro por excelencia
de la Tauromaquia del siglo XXI.



Arriba, Julipié a un toro del Ventorrillo, encaste bobo, lidiado en Madrid en la Feria del Aniversario. Tarde del 12 de Junio de 2010.

Debajo, derechazo a un toro de la misma ganadería, Ventorrillo, lidiado en La Maestranza durante la Feria de Abril. 
Tarde del 16 de Abril.










Alumnos Escuela Taurina Arganda del Rey
Fundación el Juli



5 de Febrero 2011. Los alumnos de la Escuela Taurina del Juli se enfrentan a novillos 
de tres hierros diferentes, que son:

El Freixo, línea Jandilla y Salvador Domecq.
El Soto. Domecq
Campo Nuevo, línea Juan Pedro Domecq vía Montealto.



¿Qué será de estos muchachos dentro de cuatro años, cuando la única opción que tengan para optar a ser toreros es anunciarse en Madrid con una de Moreno Silva o Flor de Jara? 

Está claro, leña al mono, al ganadero, al IVA, al Siete, al sistema taurino, a los toros en Interior y al toro que mató a Manolete. Todo eso antes que reconocer que quizás la formación por parte de las escuelas taurinas no es la más adecuada...

jueves, 10 de febrero de 2011

Aquí hay gato encerrado (nunca mejor dicho)




Lo cuenta bien en el Mundo de anteayer Zabala de la Serna: algo huele a podrido en los últimos triunfos de las figuras europeas en la México. Ponce, Castella, Juli y Perera han logrado sus conquistas con el mismo material que se llevan los párvulos de la tómbola del pueblo: con el torito de regalo. 

Indultos, el de Castella, -del morito que donó, se entiende-; rabos, el de Guapetón, que se llevó el July; la enésima renovación de Ponce como consentido de la México, sin dar un paso atrás: no dudó en regalar el ¡noveno! de la tarde. O ya de la noche; y lo último, la ofrenda de Perera, que falló a espadas y perdió los máximos trofeos del peludo obsequio.

Esta compra-venta de triunfos hace años que en España, a Dios gracias, está prohibida.

Al aficionado mexicano, solo decirle que no se lleve a engaños: los sobreros de regalo no son más que las limosnas de unos privilegiados que creen estar por encima del bien y del mal.



martes, 8 de febrero de 2011

¿El fin justifica los medios?

El hierro con el que sueñan muchos




Desde que los toros se metieron en parlamentos, palacios con neones rojos y demás burdeles ministeriales, mucho se ha hablado de libertad, democracia, derechos y respeto por las minorías, sobre todo desde el atril del taurinismo oficial. Obviamente, como no puede ser de otra manera, esta gentuza cambia de modo de pensar cuando dejan de ser la minoría para convertirse en la mayoría. Nazionalsocialistas de andar por casa. Taurinejos al servicio de su propio bolsillo. Estos son los que quieren "reverdecer los laureles de la Fiesta". No creo que sea necesario explicarle al ávido lector que para fulanos de semejante calaña, el término "reverdecer" significa mover cielo y tierra para seguir fabricando el mayor número posible de billetes verdes a costa del aficionado.

Ahora resulta, que después de siglos de historia, el Toreo se fundamenta, según muchos, en la asistencia de público, en la capacidad de convocatoria de las masas. Ya no se conforman con orejas, apoteósis o indultos. Esto tiene que ser como el fútbol. Todo lo que no sea una fiesta, una orgía de gente -da igual que sean chinos mandarines o un grupo de mozos de despedida de soltero- que abarrote los tendidos, aunque sea para asistir a un espectáculo fraudulento e impuro, no es digno, no merece la pena.


Hace cosa de un par de días, nos enterábamos a través de Toro, Torero y Afición -siempre al quite-, de cierta movida tendenciosa de Gerardo Ortega contra Tomás Prieto de la Cal. A través de las redes sociales, en su cuenta de twitter, rajaba de lo lindo contra el ganadero de los míticos veraguas, al que llamó "cariñosamente" -y cito textualmente- "el colega de los jaboneros" o "amargado taurino". ¿De qué se acusa a Prieto de la Cal? De decir que todas las ganaderías con origen Domecq le parecen la misma cosa.  

El caso es que una cosa ha llevado a otra y se ha abierto un interesante debate: los hunos -que son mayoría- defendiendo a las figuras, que son las que atraen a público, cómo no, y los toros que llevan debajo del brazo, los archiconocidos danieles, zalduendos, juampedros, cuvillos o ventorrillos, que son los que posibilitan los triunfos a los encargados de llenar las plazas. En su hipótesis simplista de la tauromaquia cargan contra las corridas concurso, por el mero hecho de que el cemento del tendido se nota demasiado. Las corridas toristas, tampoco son de recibo, exceptuando las de Miura o Victorino, pues ya se sabe, sólo son interesantes para cuatro gatos. Se mofan de una feria en la que puedan estar anunciados toros de Pedrajas, Veragua, Santa Coloma, Urcola o Gracilianos, por lo mismo: eso no le puede interesar a nadie.

A los hotros, los que somos minoría, no nos queda nada más que persignarnos y seguir huyendo hacia delante, rezando para que no nos toque lidiar en la vida con un yerno taurino. ¿Quitamos también las novilladas, porque son deficitarias? ¿Qué pasa con las becerradas, a las que no acuden ni los amigos de los capas? ¿Por esa regla de tres podemos considerar Ajalvir un éxito y la concurso de Zaragoza un fracaso?

¿Cual es el fin? ¿Atraer a la gente a la plaza, al precio que sea? ¿Que pasará, porque pasará, cuando dentro de veinte años las corridas de toros sean un espectáculo con ínfima repercusión? ¿Dejará por ello de ser un arte? ¿Perderán las corridas su justificación ética? ¿Después de cientos de años de historia y multitud de muertos en las arenas, todo se reduce a una cuestión numérica?

El futuro se torna negro si esta es la manera de pensar de los que gobiernan la Fiesta. Para cuarenta, o para cuarenta mil, el Toreo debe de mantenerse fiel a su historia y naturaleza.

El fin -de unos cuantos- no justifica los medios.




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domingo, 6 de febrero de 2011

Uno de los nuestros XII: Saltillo

Dibujo: Atlético Martín



Antecedentes históricos :En la segunda mitad del siglo XVIII, el Conde de Vistahermosa forma su famosa ganadería, cuya parte principal pasa a don Salvador Varea en 1805 y de éste en 1820 a don Pedro José Picavea de Lesaca. Posteriormente pasa a su viuda y de ésta a su hijo don José Picavea de Lesaca. En 1845 le adquiere don Antonio Rueda de Quintanilla, Marqués de Saltillo. En 1880 pasa a su viuda doña Francisca Osborne y de ésta a su hijo, que poseía el mismo título que su padre. Al fallecimiento de éste, en 1918, su viuda vende la ganadería a don Félix Moreno Ardanuy. Tras su fallecimiento en 1960, pasa a su hijo don Félix Moreno de la Cova que a partir de 1969 anuncia “La Vega”. Desde 1978 pasa a denominarse “Saltillo”. De don Félix Moreno de la Cova pasa a sus hijos don Félix y don Enrique Moreno de la Cova Maestre, que en el año 2000 la aportan a la sociedad ganadera Saltillo, S.L. Esta ganadería es origen de grandes y famosas ganaderías en España como Marqués de Albaserrada (victorinos), Santa Coloma (Buendía) y México como “Piedras Negras” y “San Mateo”.



En el año 2002, tras el fallecimiento de su tío, don Javier Moreno de la Cova, adquieren vacas, eralas y añojas procedentes de don Félix Moreno Ardanuy, antes "Saltillo"

Procedencia actual :Marqués de Saltillo


jueves, 3 de febrero de 2011

En defensa de los Toros de Cenicientos

Toro lidiado en Cenicientos del Conde de la Corte. Larga cambiada

Publicado en
11- Septiembre-2009



Hace tiempo tenía en la cabeza escribir algo sobre los toros de Cenicientos.



Vaya por delante que escribo desde el estricto punto de vista de aficionado a los toros, con abstracción de todo aquello que pueda afectar a los habitantes de Cenicientos. Esa cuestión es suya y no mía. Y escribo lejos de rancias, caducas, viscerales y estúpidas rivalidades entre localidades vecinas, que hora es de arrinconar en el desván del olvido.



Dicho lo cual, me declaro defensor de los toros de Cenicientos (sobre todo desde que han abandonado la máxima del “toro grande, ande o no ande” y han superado la intransigencia relativa al sentido en que los picadores deben abandonar el ruedo). Me declaro, pués, defensor de un empeño colectivo por ser robinsones en el océano de la manipulación, de la mentira, de la estafa, del trágala y de la imposición de los intereses del taurineo. Allá quien le guste otro tipo de tauromaquia; con su pan se lo coman y con su cartera se lo paguen. A mí -ya lo dejé escrito- no me gustan los festivales, y menos aún esos auténticos festivales que asolan la geografía española y que se anuncian y venden como corridas de toros, y que la prensa vocea, casi siempre interesadamente. Una prensa que, a la mínima y en simbiosis, aprovecha para soltar una palmetada a ese mosquito (al que llaman “Valle del Terror”) que importuna a la “Familia Taurina”. Para muestra, tres botones:



PRIMER BOTÓN: Los hermanos Boix, Juan Blanco Palomo y Alberto Soler.


En 2002 se publicó el libro “Por los adentros”, de Jaime y Salvador Boix (Ed. Espasa, 2002). Después de publicado el libro, Salvador Boix se hizo cargo de la segunda etapa de la carrera de José Tomás. Leyendo el libro, no nos extraña la deriva que ha tomado la carrera del de Galapagar.



A propósito de un festejo en Villa del Prado, el libro relata los comentarios sobre el “Valle del Terror” de Juan Blanco Palomo, apoderado de José Luis Pérez “Niño del Tentadero” de los que entresaco las siguientes frases: “Nos hicimos enteros el Valle del Tiétar, de cabo a rabo. Aquello eran verdaderas corridas de toros, con novillos de más de quinientos kilos que asustaban. Esas barbaridades son allí normales. A mí me daba bastante apuro (…) porque allí se respiraba la tragedia cada tarde”; “Claro que también podía decir que no toreábamos semejante barbaridad; pero si dices eso, adiós muy buenas, ni pagando te vuelven a poner allí. No puedes escoger”; ”esto es de locos y a menudo piensas que no tiene el menor sentido: hacerte seiscientos kilómetros, y encima pagando, para ir a pasar miedo con toros de procedencia desconocida, de media o ninguna casta, o para que te peguen un revolcón o una cornada, como nos pasó en El Tiemblo; esta es la cara más amarga de la fiesta. En el Valle del Terror se torea todo menos toros”.



Escriben los autores: “El Tiemblo, 4.000 habitantes, provincia de Ávila, es uno de los pueblos de la vertiente norte de la sierra de Gredos que forman parte del circuito taurino conocido como el Valle del Terror, denominación que abarca un contorno geográfico no muy claramente definido y comprende diversos valles: el del Tiétar, el del Alberche y otros. (…) La región es, por cierto, hermosa. Por ella suelen moverse los aficionados para seguir a los novilleros que se ven sometidos a una prueba de valor, enfrentados a novillos más crecidos que toros y de una dureza no mineral, como los de Guisando, sino peor: animal y hasta a veces bestia”.


Reproducen los comentarios de un banderillero, Alberto Soler, que no tienen desperdicio: “Bueno, yo empecé por esa zona [el Valle de Tiétar], sí; pero ahora veo las cosas de otra forma. Allí se exige el toro grande, con peso, con pitones. Este toro no puede embestir la mayoría de las veces. Se defiende. Esto no da espectáculo. Como banderillero, creo que es casi un crimen mandar a novilleritos sin oficio a entrenarse con animales con los que no pueden. Muchos acaban en la enfermería. Ni las empresas ni los toreros tienen nada que decir porque allí eligen los toros las comisiones de fiestas o los concejales, y no se dan cuenta de que los toros grandes no son necesariamente los toros buenos para disfrutar con un buen toreo. Pero, en fin, esto no cambia. Y los novilleros no tienen más remedio que aceptar lo que les echen o dejarlo correr”. Se da un dato final: “El banderillero Alberto Soler ganó en 2001 el premio al mejor peón de brega en la Feria de Cadalso de los Vidrios, en estos valles”.



SEGUNDO BOTÓN: Fernández Salido.



En el periódico LA RAZON del 22 de agosto de 2004, bajo el titular Tarde de toros en el «valle del terror» Alberto Fernández Salido daba cuenta a su manera de lo vivido una tarde en Almorox, en que se anunciaron reses de Monteviejo para El Fundi, Rafael González y Gómez Escorial. La entradilla del reportaje era todas una declaración de intenciones:



“La tarde del jueves pasado, tres toreros tenían una cita en una plaza portátil con seis toros de espanto y una afición brutal y algo cainita. Eran fiestas en Almorox, pueblo toledano enclavado en lo que los mentideros taurinos llaman el «valle del terror». Éste es el relato de una tarde de toros donde todo resultó exagerado”


Y su resumen sobre la zona era el siguiente: “El «valle del terror» es, en efecto, un reducto deshumanizado de la Fiesta Nacional. Todo sociólogo interesado en conocer los recovecos del alma ibérica se sentiría enriquecido si se dejase caer por aquí en tarde de toros. Un lado cainita y brutal, muy español, se sienta en el tendido y se hace fuerte entre la masa hasta cobrar fuerza y expresar a gritos sus pasiones más crueles. El jueves, desde el callejón, entre dos fuegos (el de la arena, a un paso de los gladiadores y de las bestias, y el del público ávido de tragedia) fue un buen día para observar.” Lo de “en efecto” surge al hilo de un presunto comentario de uno de los actuantes (Gómez Escorial) del siguiente tenor: «Lo de Almorox es lo más parecido a un ejercicio de gladiadores. Suena brutal, pero es que es brutal. En esos pueblos poco importa el torero, sólo se fijan en el toro. Disfrutan más viendo caer de cabeza al callejón a un banderillero que contemplando un buen par»



TERCER BOTÓN: Vicente Zabala.


En su crónica diaria de la Feria de Abril de Sevilla, el hijo de Zabala, tan cursi a veces, aprovecha el viaje para clavar una pullita a su colega Moncholi, que ni pasaba por allí, utilizando como arma a Cenicientos:


“Pero cuando quinto y sexto -otra expresión, otra encornadura, otra forma- metieron la cara, las cosas no se redondearon. Vilches viene de una cornada de caballo con arrancamiento de safena en la «Monumental» de Cenicientos, que es la plaza de Moncholi y una carnicería de toreros. Y allí, curiosamente, también cayó Joselillo con las carnes rotas en el ferragosto criminal. No valen disculpas, pero cuentan las historias. Ocho meses se ha pasado Luis Vilches reconstruyéndose el cuerpo y el alma. Y con las cicatrices de la memoria trató de hacer de tripas corazón con el toro de la tarde, y en líneas generales su concepto del toreo rayó a buena altura en un trincherazo monumental, en fases de viejas promesas de calidad (ABC 21/04/2009)."


El problema es que la verdadera realidad de los toros de Cenicientos, y por extensión de toda la zona, sólo la conocemos los que aquí vivimos y unos pocos que tienen interés en la tauromaquía con toro de lidia. La mayoría, gracias a estos personajes, sólo tienen como referencia los hechos que, de forman torticera, se publican en diarios nacionales o en libros de editoriales especializadas. Podría de mil y una formas responder a estos personajes (y hasta zaherirlos, que lo tienen merecido), muestra variada de lo peor del taurinaje (matador de toros, uno; banderillero, otro; apoderados, dos; y periodistas, cuatro); no están todos los que son, pero son todos los que están. No respondo porque me parece innecesario, pues presumo que el lector está suficientemente capacitado para sacar sus propias conclusiones. Yo sólo pido que, al menos, nos dejen en paz a los que nos gusta la fiesta íntegra y respeten los escasísimos reductos donde aún se lucha, no siempre con victoria, por algo tan simple como el respeto y cumplimiento de las normas esenciales del Reglamento Taurino. Sólo eso; no creo que sea mucho pedir.



P.D. He encontrado en otro libro, un cuarto botón. Se trata del libro titulado "Sonajero", del que es autor Felipe Garrigues, publicado por Espasa en 1998. Así se explaya el "abogado, periodista, ex novillero, ganadero de toros bravos y , sobre todo, un profundo conocedor de la fiesta" (según reza en la solapa del libro):


"Por otra parte, el boom televisivo español de los últimos años ha llevado el toro grande y cornúo de Madrid a la última pedanía, creando una moda que, como mancha de aceite, se reparte por el resto de la comunidad madrileña y pueblos aledaños de Ávila y Toledo. Quieren ser como en la capital, ¿por qué menos? El toro autobús, el barbas para imberbes, para chavales sin padrino que no tienen más remedio que tragar -si quieren torear- una corrida de toros sin picadores y auxiliados por cuadrillas de charanga, con medias raídas y oronda barriga de escultura de Botero.

Estos festejos, retazos de la España negra y que siguen existiendo en el umbral del 2000, sólo son noticia si llega el cornalón, el tabaco gordo, como se dice en el argot. La autoridad tan obsesionada con el fraude en el festejo mayor, hace la vista gorda en el menor. Aplicando con firmeza el reglamento, gran parte de estos festejos habría que suspenderlos. Pero es la propia autoridad municipal quien no sólo tolera, sino que fomenta. En el mes de mayo, los campos de toros bravos se ven invadidos por concejales de festejos en busca del trolebús con cuernos para sus fiestas patronales de agosto y septiembre. La complicada (apenas diez animales) búsqueda se prolonga a veces varios meses, jalonada de comidas y visitas a puticlubs, para solaz del concejal en cuestión y merma evidente del erario municipal. Este novillo, más bien toro, amoruchado y embastecido -engordado con saña (porque si no, no se vende), incluso con el guarismo sobreherrado para disimular la edad-, ha sido la dulce escuela por la que han tenido que pasar toreros españoles como Miguel Rodríguez, Javier Vázquez, Miguel Martín, El Fundi y algunos más. Es desde luego una prueba de fuego para el que consigue sobrevivir y también un pozo donde se han ahogado talentos, quizá más grágiles pero con cualidades evidentes.

Muchos piensan que la formación de un torero tiene que se dura, para forjar carácter... Dura sí, pero no un calvario. ¿Qué hubiera sido de Aparicio, de Chamaco, de Litri, Finito de Córdoba o Jesulín, si hubieran tenido que forjarse en la comarca -el nombre lo dice todo- llamada Valle del Terror? Rivera Ordóñez, que está cuajando en torero pundonoroso a pesar de sus cuidados comienzos, jamás se las tuvo que ver con semejantes bisontes. Ni muchos otros: Ponce, Joselito, etc..."

No tiene desperdicio, ¿verdad? Sólo diré una cosita: Enrique Ponce toreó una corrida de toros en Cadalso, acompañado de César Rincón y Lara el 3 de junio de 1990; y es que conviene documentarse mínimamente antes de escribir un libro (¡ah! y saber sobre lo que se escribe).

martes, 1 de febrero de 2011

Guapetón...

Guapetón, según las Brigadas Amarillas




... era su nombre, a pesar de ser más feo que Francisco Picio, pobre de cabeza, manso, justo de fuerzas y para colmo, regalado. Un puyazo con carioca tomó. Lo de Guapetón, sería por lo toreable, que es término bien guapo para los que ven el toreo como un baile regional. Así fue quitado por navarras. Ya con la franela acudió al cite con prontitud, derrengado, con la lengua lamiendo la arena, sin causar molestias al Juli, que le dió fiesta con su habitual tauromaquia, basada en el temple de lo ya templado y el dominio de lo ya dominado. Muy teatralizado todo, eso sí. La largura de los muletazos chocan de frente con el apocamiento de la suerte, descargada una y otra vez por norma, nunca enfrontilados toro y torero. Toreo por alto, circulares, invertidos o no, martinetes y molinetes. Derechazos poligoneros, en cantidades industriales. Y el toreo esencial, que brilla por su ausencia. Lejos quedó aquello de los veinte naturales por bajo. Ahora asistimos atónitos al número de la noria romana, en la que un pollino da vueltas alrededor de "la maquina" con el objetivo de rescatar del pozo un puchero con agua. Ese jumento, mal que bien, sacaba algo de la alberca. Guapetón, que de burro tenía su comportamiento, se hartó de caracolear en circulos infructuosamente, incapaz de sacar casta de dónde no hay. No sé las vueltas que daría sin decir nada con su embestida.

Un julipié le quitaría la vida a este Guapetón, que acabó sin rabo. Mal asunto.