sábado, 11 de junio de 2011

Spain is a bitch




Publicado por Chapu Apaolaza en los diarios de Vocento



Spain is a bitch. A veces. Lo dice la Fundación de Raperos Atípicos de Cádiz. Este es un país de descubridores, de hombres de letras (venga uno ahora a nombrar a Becquer), cuna de las libertades, del paté de cabracho, del helicóptero y el txakoli, el submarino, la botánica, las aceitunas gordales y la circulación sanguínea, sí, vale, cuna de todo eso es España. Pero también una patria muy perra, hecha de hombres perros que vistos así de lejos sonríen como una masa simpaticona que duerme después de comer y se acuesta tarde, pero que de mirada de cerca horripila como los insectos al microscopio. En este sacrosanto lugar no hay nada que no se haga por rabia. Por sus cojones y por la envidia, lengua oficial del Estado, hemos cambiado gobiernos, hemos dado la vuelta al mundo, nos hemos arruinado con un todoterreno más grande que el vecino, hemos sucumbido en batallas inútiles y hemos matado a nuestros hermanos, desde Trafalgar a la batalla del Ebro. Cuando hagan el himno, déjense de mares azules y verdes montañas y no se olviden de incluir 'Tus muertos'. Otros países venden flores, quesos, cocina con mantequilla, coches deportivos, sistemas fiscales... España tiene para exportar bilis y sangre negra como para llenar dos veces los Océanos de este simpático planeta que da vueltas. Llevan los compatriotas -quizás sea un rasgo común a todo el orbe- la boca cargada de pentotal sódico y en las garras, curare. Véase el despliegue de mala leche alrededor de Ortega Cano. En Twitter, ese engendro que invita al paseante a entrar en las sucias mentes del vecino, se ha leído de todo. Al margen de lo judicial, el país ha devorado lo que quedaba del honor del torero, como un zopilote 2.0. ¿Por justicia? ¿Por delincuente? ¿Por robar? No.España lo ha descuartizado porque le caía mal. Así somos.

1 comentario:

Enrique Martín dijo...

Antonio:
Yo no sé si añadiría algo, si acaso la incultrua que nos ciega y la soberbia que no nos deja ver.
¿Y si ahora resultara que lo de Ortega Cano no fuera como decían en un principo?
Un saludo