jueves, 1 de diciembre de 2011

Puerta. El antagonista de Cultura.


















Ha muerto Diego Puerta Diánez. Diego Valor. Diego Cojones. Puerta, el que junto al Viti y Camino, componía un cartel que el aficionado recitaba de carrerilla, como la alineación del Madrid de Di Stefano el buen pelotero. Portador de la gracia sevillana antes de que la fábula antitaurina de la musa con peineta y el duende escacharra-relojes, arrasara con el decoro y la personalidad de la "escuela sevillana" -si es que alguna vez ha existido, con razones y argumentos para definirla, (yo dudo, pregunto y doy la bienvenida a las respuestas).

Como me pasa con muchos otros, nunca pude verle. Biografías, críticas de Cañabate o Corrochano, algún video suelto, y ese boca a boca vomitado por los recuerdos de aficionados que dan testimonio de toda una vida viendo de toros y que ha trasladado medio siglo sus hombradas hasta nuestros días. Por algo será, digo yo. Así que no me siento capaz de hacer esos sesudos análisis sobre el toreo del maestro Diego Puerta.

Hay otros que sí, que tienen esa mezcla tan taurina de desfachatez, hipocresía e ignorancia que no dudan en aplicar en estos casos. Será por el bien quedar, que cuando hay difunto de por medio, es una de las actividades favoritas del españolito de a pie. Así, los atunes que hace un par de meses querían mandar a los miuras al matadero hoy se deshacen, como terrones de azucarillo en café con leche, con las tardes que compartieron Diego Puerta y los garlopos de Zahariche, en especial la de aquel Escobero en la Maestranza. Los de la campaña terrotorista, los de Burladero y eso, los muy fariseos, que hoy no hubieran dudado en escribir que "eso no es torear", "así nunca puede haber arte" o "cómo puede gustar eso", lo ponen de artista pa'rriba, que es uno de los peores calificativos que se le puede dedicar a un matador de Toros. El ínclito Zabala se despacha con una comparación tan absurda como interesada: la de Diego Puerta y José Tomás. Como si tuviese el mismo peso una carrera llena de Miuras, ferias de postín y tardes de gallos que una a base de cuvillejos en provincias con lo más viejo del oficio por delante y lo más imberbe cerrando el cartel por detrás. Aficionados, miembros insignes del jédiez y demás farándula pro-cultura se suben hoy al carro de Diego Puerta para volver a bajarse en la siguiente estación pasado mañana.

La tauromaquia que subvencionan y difunden es antagónica a la del maestro -también es la de muchos de sus coetáneos-. En nuestros días no es posible, porque no quieren, ver a una figura con ese compromiso, ni esos carteles tan rematados, ese compañerismo, noble y feroz a la vez, es una utopía, el miedo -gusanillo que empuja al aficionado al tendido- se ha rebajado a niveles comatosos, y la casta se ha reducido a rescoldos que apenas si dan calor a la Fiesta. Pero lo que cuenta es que con esto los portales han sumado miles de visitas, las revistas tienen su especial para el próximo número y las figuras, con su tuitero pésame, han quedado como Dios. Y todo seguirá igual. Hasta que se nos vaya otro maestro y vuelvan a sacar la careta de lo políticamente correcto. Mientras lentamente el que está agonizando entre estertores es el Toreo. Pero eso a quién le importa.


En fin, que la tierra le sea leve.



6 comentarios:

  1. Antonio Díaz, en muchas ocasiones cuando hacemos un comentario en exceso es muy fácil que metamos como vulgarmente se dice "la pata", es lo que me parece a mí que ocurre en este post recordando la figura del gran torero sevillano Diego Puerta.

    Dice usted Sr Díaz "Hay otros que sí, que tienen esa mezcla tan taurina de desfachatez, hipocresía e ignorancia que no dudan en aplicar en estos casos, será por el bien quedar, que cuando hay difunto por medio, es una de las actividades favoritas del españolito de a pie".

    Como la mayoría somos españolitos de a pie, como puede ser su caso y el mío, resulta que también practicamos nuestro deporte favorito que es hacer crítica de algo o de alguien.
    Usted por ejemplo y aprovechando que hay difunto por medio ataca a otro diciendo: "Como si tuviese el mismo peso una carrera llena de miuras, ferias de postín y tardes de gallos que una a base de cuvillejos en provincias con lo más viejo de oficio por delante y lo más imberbe cerrando el cartel por detras".

    Y yo para unirme a esos muchos españolitos de a pie, me he manifestado con esta crítica en un comentario que me parece fenomenal y que demuestra la gran afición de Antonio Díaz y lo bien resumido que está este especie de homenaje póstumo a Diego Puerta, pero a mi modo de ver ha sobrado para destacar a uno, atacar a otro.

    Sr Díaz, creo que sabrá aceptar mi comentario, que lo mismo está equivocado pero es como lo he visto yo.

    Saludos cordiales

    Jaime del Castillo

    ResponderEliminar
  2. Veo que la generosa realidad es justa, duela a quien duela. Cómo voy a comparar a 'un maestro' como Diego Valor, visto por mí en videos, en Pamplona de chico, volando como un héroe por encima de las cuernas de una fiera furibunda, con lo que ahora se dicen figuras. Me quedo con tu reflexión y mis recuerdos de imberbe. Sobretodo, no olvidaré a ese serio señor de traje, perdida la compostura muerto de risa, tirado en una gran alfombra.
    Un abrazo, Antonio.

    ResponderEliminar
  3. Fue uno de mis preferidisimos.
    Una de las patas de mi terna preferida, de mi añada historica.

    Los riojas del SESENTAYCUATRO TAMBIEN LO ERAN.

    QUE EN PAZ DESCANSE MAESTRO.

    ResponderEliminar
  4. Sr. Jaime, yo no ataco a nadie, simplemente intento aclarar una burrada escrita por uno de los críticos más leídos en la actualidad. Si esa barbaridad de comparación no se hubiese producido aquí no se habría dicho ni mú. Pero hay cosas que echan tanta peste que convienen atajar y aclarar en el momento, sin titubeos. Usted puede ser tomasista, demuestra que tiene buen gusto y que sabe de toros, pero no puede negar que compararlo, y ahí está el curriculum, con Diego Puerta es un disparate. Cuando maten lo mismo, hablamos.


    Patxi, pues me das mucha envidia, que yo no tengo ni un maldito recuerdo.

    Lesaqueño, usted si que sabe. Ha catado buenos vinos y ha visto grandes toreros. Eso no puede ser malo para la salud.


    Saludos a todos.

    ResponderEliminar
  5. Un ignorante como yo...gracias a leer este blog, en el que a pesar de que ahroa me manifieste menos sigo con la misma devoción. Ha aprendido mucho de toros y prismas, para mi desd luego no cabe duda que hay una finca entre La Camapana y Lora del Rio que es fundamental para que en este mundo se sepa quien de verdad s un genio y un TORERO! Desde luego que me gusta José Tomás pero me moriré sin verlo así...y a Morante...y otros que no me gustan tampoco los voy a ver. Gracias por seguir enseñandome. Un saludo. El cabesssa.

    ResponderEliminar
  6. Sr Díaz, para empezar en primer lugar retiro lo de "ataca" y lo dejamos en crítica. En segundo lugar yo no soy tomasista, porque por esa misma regla de tres usted puede ser antitomasista o madridista por poner el ejemplo del la alineación del Madrid de Di Stefano, lo que demuestra tener fe de victoria que no es malo.

    Usted si me lo permite y con todo respeto le diré que usted me saca ventaja en todo y así se lo deseo, de lo que le queda por ver, que Dios quiera que sea mucho, y yo hoy por hoy mi ventaja sobre usted, me lo da los años y lo que he visto a lo que a toros se refiere, eso lleva consigo cierto "temple" para muchas cosas incluidas un simple comentario.

    Es por eso que su ímpetu de juventud le ha llevado a poner términos no muy adecuados y con muchos signos de parcialidad como: desfachatez, hipocresía, ignorancia, fariseos, cuvillejos o imberbe.

    Como no trato de hacer una polémica sobre un tema que por actualidad tiene el fallecimiento de Diego Puerta, quiero terminar diciendo que lo bonito y lo más indicado es recordar al fallecido por su grandeza torera, por haberse entregado al máximo todos los días que toreaba sin mirar si la plaza era de más o menos categoría, y sobre todo por su seriedad a la hora de decidir su retirada y que esta fuese definitiva y no como otros que se iban y después volvían, de esos hay unos cuantos.

    Con mi mejores deseos para usted y su familia en estas próximas fechas navideñas y felicitándole por su taurinísimo blog, le saluda atentamente Jaime del Castillo

    ResponderEliminar