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| RJC El País |
Del primer tercio poco hay que decir. En esto creo que todos estamos conformes. Incluso los aficionados de nuevo cuño. La suerte de varas era antes trágicamente bella. Hoy es una parodia repugnante, francamente desagradable. La pujanza del toro chocaba con la destreza y el arte del picador. Ahora, ni hay pujanza en el becerro, ni el piquero es otra cosa que un individuo que, encaramado en un caballo blindado por el peto, asesina a mansalva, clava, ahonda, barrena y raja sin piedad. Desde la segunda acometida del becerro, cada puyazo se convierte en tres o cuatro, porque el picador, si no atina al primer agujero, rectifica la colocación de la puya tantas veces como sea necesario, hasta encontrar la primera brecha, y entonces se ensaña y mete media vara. Si el becerro intenta irse, le tapa la salida con el caballo. Si el becerro retrocede, va largando palo, como la cuerda de una cometa. El caso es que el puyazo no acabe nunca. Y el público, encantado, porque sabe que, saliendo el becerro medio muerto, es el único modo de que, luego, el astro coletudo se decida a hacer el poste y le entusiasme con sus estatuarios, sus naturales adulterados y sus derechazos. Y hasta es posible que, para colmo de delicias, haga el inapreciable regalo de unos pases mirando al tendido, o de unas arriesgadísimas manoletinas.
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| Puyazo criminal. RJC El País |
"Hoy se torea peor que nunca"
Adolfo Bollaín
De la conferencia celebrada en el Club Taurino Madrileño
el 7 de Febrero de 1947
Antonio me veo en la obligación de decirte qué no soy "ista" de nada ni de nadie.
ResponderEliminarEs más un día en una corrida concurso me acusaron de "torista" y me ofendí, por que le echaba "olés" al de Tomas Prieto de la Cal durante su embestida al tercer puyazo; de forma que pude echarle unos cuantos, hasta qué llego al palo de Montiel qué por otra parte, venía volando.
Respecto de Manolete, creo recordar haberte comentado qué en una ocasión me echaron de la Cossio de Jaén por decir que a Manolete se lo llevó "Islero" por delante sin haber pegado un natural como Matador de Toros (te lo pongo con mayúsculas). Seguro que debí merecérmelo.
A ese picador había que haberle cortado la mano izquierda antes de salir. ¡Qué sinvergüenza!
Saludos de Gil de O.
Antonio:
ResponderEliminarEsa foto sí que es demoledora, como decías el otro día. Esa es nuestra suerte de varas. De lo de abajo, poco que hablar, ya habla por si solo.
Sobre lo de Gil de O., solo tengo que decirle que a mi me habrían echado de más de un sitio por afirmaciones similares sobre maestros aceptados por todo el mundo. Aunque las afirmaciones tan rotundas solo las hago sobre los que he visto en vivo en la plaza. No por los vídeos, porque para ciertas cosas hay que estar tan preparado como Gil de O.
Un saludo