Estos son los Palha, los auténticos, que fueron jugados en el concurso goyesco (menuda diferencia con la de Ronda) de recortadores en Zaragoza. Sobran las palabras con estas imagenes, que ayudan a entender el gran arraigo que está teniendo en la gente más joven los festejos populares.
Estas fotos y algunas más las puedes encontrar en la
web de Toropasión.
Yo tuve la oportunidad de asistir a uno de estos festejos la semana pasada en la plaaz de la Misericordia de Zaragoza. La plaza a reventar, de hecho se comentó que se habían vendido unas 1.500 entradas de más, las colas interminables,la gente como loca. Testando un poco el ambiente, preguntando a la gente que asistía, oyéndoles, te das cuenta que el tirón no lo tiene el ganado (de hecho no saben si son Palhas, Arriazu navarro o cabras montesas), lo que gusta es que (además de ver un espectáculo de verdad, sin artificios ni mentiras, incluyo aquí el ganado, porque aunque no sepan su procedencia sí que notan que no son vacas tontas) es incruento, no se ve sangre por ningún sitio, y eso es algo que atrae mucho.
ResponderEliminarSi queremos seguir teniendo corridas de toros, no ya llegar a la demanda de estos festejos populares (el ratio coste-beneficio de estos eventos son los que compensan las pérdidas de las corridas de toros) es lo que hace atractivo al empresario pujar una plaza de primera (en Zaragoza esos espectáculos se subarriendan directamente a Toropasión).
Aun así mientras haya Cuadris y piqueros que den el pecho al toro esto no se va a acabar nunca.
Salud y suerte.
Óscar
Viendo la estampa y sobre todo los pitones de estos animalitos ,todavía “sorprende-cabrea” más, que haya una pila de almasmías por estos cuadernos-blogs ,por esas ondas "murcianas" y por ese papel prensa, sin querer ver que la mayoría,todo,lo que lidian los toreritos que más cobran ,(en euros que no en especie),están retocados.Retocados hasta donde no se debe retocar sin partirle el alma a la Fiesta.
ResponderEliminarQue no son toros de lidia y por tanto, los figurines que los engañan,que estos además de engañar al toro les mienten, no se pueden llamar en buena lid matadores de toros;dejando aparte ,que ya es mucho dejar,que demasiados de los principales, se presten a que se de el primer paso para quitarles su honrosísimo título de MATADORES DE TOROS,aceptando participar en la bufonada de Quito.
Viendo a estos animales,aunque solo sea en retrato,se da cuenta cualquiera que le guste esto ,sin intereses ni contubernios inconfesables, del engaño,la mentira y la tropelía que se ha cometido con este rito fabuloso ,al que han capado vilmente esta corta tropilla ,que son capaces de torear 500 corridas al año sin que les rocen un alamar (y no me da la gana de justificar ahora que yo no quiero que cojan a nadie).
Ni quiero ni me gustaría con mis comentarios parecer el buhonero de la Fiesta, aquel que en las películas del Oeste se presentaba con su carro cargado de ataúdes y un buitre como animal de compañía,pero hay que estar ciego para no ver la cantidad de estos animalitos que sobrevuelan los concursos de arrendamiento de las plazas,los cercados de las ganaderías,los reconocimientos en los corrales,los trapicheos en los despachos, el atropello a los débiles,el uso y abuso de sus plataformas desinformativas.En fin, todo eso que hace que se otee en el horizonte el carro del de la nariz aguileña vestido de negro,que viene de Barcelona a seguir con su trabajo.